Bolivia celebra el solsticio invernal 5527 con el reconocimiento de la ONU
Bolivia conmemoró este viernes el Año Nuevo Andino, Amazónico y del Chaco 5527, ahora reconocido como Día Internacional del Solsticio por las Naciones Unidas, en medio de una gran fiesta de ritmos y danzas típicas que se replicaron en distintos puntos del país.
Durante un discurso, el presidente boliviano, Evo Morales, destacó el reconocimiento del organismo internacional del solsticio de invierno celebrado por las culturas andinas asegurando que los pueblos originarios están con la "verdad" y con la "razón".
El mandatario señaló que esa gestión ante la ONU fue un "trabajo conjunto" de Perú, Ecuador, Chile y Bolivia, que comparten esta tradición ancestral de sus pueblos originarios.
El acto central de recibimiento del solsticio o de la fiesta del "Willka Kuti" fue en el centro arqueológico de Tihuanaco, situado a unos 80 kilómetros al oeste de La Paz, Patrimonio de la Humanidad desde el año 2000.
También se efectuaron celebraciones similares en casi un centenar de sitios en las distintas regiones bolivianas como los valles, la amazonía y el chaco.
Los rituales comenzaron en la madrugada al son de ritmos típicos interpretados con tambores e instrumentos de viento, danzas autóctonas, además de rituales para la Pachamama o Madre Tierra realizadas por los amautas, que son los sabios de la religión andina.
Una gran wajta o mesa preparada con elementos simbólicos como pequeñas figuras que representan prosperidad y fetos de llama, a la que después se le prende fuego, se preparó en honor a la Pachamama.
El punto culminante de la festividad es cuando los cientos de congregados recibieron los primeros rayos del sol con las palmas extendidas que simboliza la recepción de las buenas energías para dar inicio a un nuevo ciclo agrario en el hemisferio sur.
Morales recibió las primeras energías en compañía del canciller del país, Diego Pary; la ministra de culturas, Wilma Alanoca; y los presidentes del Senado, Adriana Salvatierra; y de la Cámara de Diputados, Víctor Borda.
La celebración sirvió también para que Bolivia reciba de manos de Argentina la secretaría pro tempore del Qhapaq Ñan, nombre quechua de un antiguo sistema vial que se consolidó en los años 1.450 al 1.530 después de Cristo, durante el imperio Inca y que ejercerá hasta 2021.
Centenares de personas, sobre todo indígenas y turistas, estuvieron en Tiahuanaco desde la víspera del 21 de junio para recibir ese día los primeros rayos del sol.
En 2009, el Gobierno de Morales bautizó la fiesta como "Año Nuevo Andino Amazónico" y decretó que cada 21 de junio sea festivo nacional, y en 2017 las autoridades bolivianas agregaron la zona del Chaco a la celebración.
En sus trece años en la Presidencia boliviana, Morales ha celebrado el año nuevo aimara en Tiahuanaco, pero también en otros sitios como el fuerte de Samaipata, en la región de Santa Cruz (este); en el salar de Uyuni, en Potosí (suroeste), o en su pueblo natal, Orinoca, en el departamento andino de Oruro (oeste).
SOURCE: EFE
[do_widget_area inner_adsbar]