Una decisión judicial dificulta que Netanyahu pueda viajar a España
Reuters
Un juez español decidió archivar provisionalmente una causa judicial por un asalto militar israelí a un barco de activistas en aguas internacionales en 2010 hasta que se dé la circunstancia de que alguno de los querellados, entre los que está el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, pise territorio español.
La causa investigaba desde hace cinco años una querella contra Netanyahu, cinco de sus ministros y un alto cargo militar israelí por supuestos delitos de lesa humanidad y contra las personas y bienes protegidos en caso de conflicto armado.
Pero, como otras investigaciones del mismo corte, se ha visto abocada a su cierre después de que el Gobierno español limitara el año pasado el poder de los jueces para perseguir casos internacionales de abusos de derechos humanos prácticamente al territorio y ciudadanos españoles.
Los hechos de la querella se remontan a 2010, cuando la embarcación Mavi Marmara, que lideraba una flotilla para romper el bloqueo israelí en Gaza, fue abordada en aguas internacionales por militares israelíes que cumplían órdenes de los querellados. Diez ciudadanos turcos que iban a bordo murieron tras el ataque.
La causa judicial se reactivaría hipotéticamente en España en caso de que Netanyahu o cualquiera de los querellados pisase territorio español, y el magistrado ordenó a las fuerzas de seguridad que le informen sobre si alguno de ellos aparece por España.
Ante las pocas probabilidades de que la causa prospere ahora en España, el juez de Madrid recomendó a los querellantes e incluso al propio Gobierno español que estudie llevar el caso a la Corte Penal Internacional (CPI).
El Gobierno español reformó la ley de justicia universal el pasado año, semanas después de que un magistrado ordenara la detención de exdirigentes chinos, entre ellos el expresidente Jiang Zemin, acusados de genocidio en Tíbet.
Un juez de la Audiencia Nacional se vio obligado a cerrar esta semana la investigación sobre la muerte del cámara español José Couso en Irak en 2003 a manos de militares estadounidenses y criticó la falta de competencias tras la reforma de la ley que limitó la justicia universal.
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